Por: Celine Woznica de Child To Child
Cuando llegó la invitación para participar en el «Primer Encuentro Internacional de Infancias: Con Ternura, Otro Mundo es Posible», realizado en octubre pasado en Lima, confieso haber estado un poco confundida por el título. ¿Ternura? Estoy acostumbrada a palabras fuertes como «empoderamiento» y «participación plena» cuando se habla de los niños y sus derechos. Sin embargo, durante mucho tiempo he admirado el trabajo de la ONG INFANT (Instituto de Formación de Adolescentes y Niños Trabajadores) con sede en Lima, y comprendí que debe haber una significación más profunda para el término «ternura» cuando se describe un enfoque pedagógico.
El evento fue de una convivencia del poder de la Pedagogía de la Ternura que llama a una relación de calidez, cuidado y respeto entre adultos y niños como compañeros en la construcción de un mundo en donde los derechos de los niños sean respetados y defendidos.
Los objetivos del evento fueron: promover nuevas prácticas para mejorar y fortalecer este vínculo y facilitar el diálogo intercultural e intergeneracional. Ambos son objetivos impresionantes, pero ¿cómo logramos un diálogo efectivo entre adultos y niños? Ahí es donde la experiencia y éxito de INFANT fue muy evidente: los niños dirigieron el evento.
Es cierto que los adultos organizaron el evento, hicieron las gestiones y todo lo demás, pero Gabriel de 13 años y Séfora de 12, dirigieron todo el evento con una facilidad de palabra que refleja años de experiencia en el manejo de grandes eventos, incluyendo a los niños que también fueron parte de la actividad. Para mantener el orden y añadir un poco de ligereza al evento, cada día un niño diferente se vestía como mimo y de manera silenciosa, pero exagerada a la vez, mantuvieron a los ponentes a tiempo y animaban al público a los aplausos y aclamaciones. Los momentos largos fueron divididos con canciones y dinámicas, dirigidos por niños. Este fue el evento de los niños en todos los sentidos.
Como en todos los eventos, el tiempo entre las sesiones fue valioso y los niños animaban a la unión de forma apropiada a través de juegos de fútbol, bailes y compartir de materiales audiovisuales. Las conexiones fueron hechas por los niños de Perú, Ecuador, Brasil, Argentina, Colombia, Venezuela, Paraguay, México, Bolivia y la India.
La directora de Child to Child de las Américas Dra. Celine Woznica participando con uno de los grupos de trabajo de los niños.
[su_pullquote align=»right»]Vinieron de pueblos de la sierra, comunidades en ríos, áreas rurales y barrios urbanos, y todos tenían una cosa en común: estaban organizados y trabajaban por una vida mejor para ellos, sus familias y sus comunidades. [/su_pullquote]
Los participantes jóvenes fueron líderes locales con iniciativas para prevenir la violencia contra los niños, proteger el medio ambiente y promover los derechos de los niños, incluyendo los niños con habilidades diferentes. El evento fue un ejemplo vivo de la inclusión, ya que los niños con problemas visuales y auditivos pudieron participar plenamente en las actividades gracias a los alojamientos hechos para ellos y la ternura mostrada por los otros niños que se aseguraron de que participaran en todas las actividades y en la diversión.
Child to Child se siente honrado de ser un aliado de INFANT en la promoción de la participación en los derechos de los niños en América Latina y de haber impartido un taller en el evento sobre la metodología de Child to Child.
Los tres días que los adultos y los niños pasaron juntos estuvieron llenos de «ternura» a medida que las amistades se desarrollaban y el respeto mutuo se profundizaba.
Publicación original (original post): http://www.childtochild.org.uk/news/pedagogy-of-tenderness-conference-peru/